martes, 12 de noviembre de 2013

JORNADA 3


RAKISS 1 (Jose) - NKG 0

JUGANDO CON FUEGO...

Jugó el Rakiss con fuego en la tercera jornada de Liga, como le suele gustar, porque el Rakiss es uno de esos equipos a los que complicarse un poco siempre le ha gustado. Le salió bien porque cuando tocó apretar los dientes y defender, lo hizo sin pensar y porque gracias a los cambios pudo mantener el tono todo el partido, pero no supo matar un encuentro que pudo acabar con un marcador mucho más amplio a su favor.

De cualquier forma, la primera victoria ha llegado y el equipo poco a poco va encontrándose mejor en el campo, encajando sus piezas lo mejor que puede. La última en llegar: Antonio, el anhelado portero, que para empezar nos regaló un cerrojo en nuestra meta en forma de 0 goles encajados y que desprende seguridad en cada lance del juego.

LA RESEÑA

Salió el Rakiss con novedades. Antonio se estrenó como guardameta junto a una defensa en la que los únicos que repetían eran Lobo y Miguel Ángel, como centrales, una pareja inamovible que siempre que estén disponibles es ya innegociable. En la izquierda, por fin, Jorge, que pudo abandonar su papel de héroe impagable e improvisado bajo palos y jugar al fin donde más le necesitamos. Y Roberto por la derecha, como lateral esta vez, porque ahí donde le vemos Rober vale para todo, gracias a su entrega y a su derroche de ganas.

Por delante en el centro del campo partían como tripleta Jose, J.J. y Pitu, con Litri, Alberto Lozano y Pacheco como delantera en tridente. Un 4-3-3 que cada vez se sustenta más en el medio campo, donde Jose, Pitu y J.J. demostraron que cuando ellos entran en juego el equipo cobra vuelo y llega a arriba con mayor frecuencia.

El partido comenzó con el Rakiss decidido a marcar el ritmo, Miguel Ángel y Lobo demostraban su poderío atrás y las ocasiones del rival eran desbaratadas fácilmente, mientras que arriba Pacheco comenzaba a entrar en juego. Las primeras ocasiones llegaron desde la esquina, pero la mejor jugada de la primera parte la protagonizó el delantero rakiniano.

En una jugada en velocidad Pacheco controló el balón en el costado izquierdo del equipo y encaró a la defensa contraria saliendo hacia la línea de banda. Daba igual si había uno o veinte defensas, eso al “Toro” del Rakiss nunca le ha asustado, ninguno de ellos puede ser tan rápido y él lo sabe. Dribló defensas hasta llegar a línea de fondo y entró en el área por el costado levantando la cabeza para encontrar a Litri que le pedía el balón ya en el área pequeña.

La pelota fue hacia el centro entre una maraña de piernas que impedía un pase claro, Litri controló hacia el lado contrario de la portería pensando en disparar a la media vuelta, pero la portería estaba como una boca de Metro en hora punta. No había remate, necesitaba ayuda.

Fue entonces cuando la corneta del séptimo de caballería resonó en La Elipa, el ocho del Rakiss miró hacia atrás y vio como Jose llegaba sobre los caballos del centro del campo rakiniano, puso el balón atrás y el mediocentro del Rakiss conectó un disparo colocado hacia el palo izquierdo de la meta contraria, en el hueco perfecto para meter un balón. El portero, a contrapié no pudo hacer nada. Una jugada fantástica del ataque del Rakiss que llegó con todo al área y que abría el marcador.

El rival respondió con varias faltas colgadas al área. Pero unas veces el fuera de juego y otras la figura de Antonio, desactivaron el peligro. Salió el portero del Rakiss en varias ocasiones con tenazas en las manos para atrapar el balón con nervios de acero y colocación allá adonde fuera colgado el esférico, como caído del cielo. No hubo lugar para sustos, demostrando que es un portero de absolutas garantías. Un fichaje fantástico.

El gol pareció enarbolar el ataque del Rakiss, solo ensombrecido por la lesión de Litri, que tuvo que dejar su sitio a Abraham tras sufrir un pinchazo en el gemelo. Antes J.J. había estado a punto de marcar en otro balón suelto que terminó con un disparo desde fuera del área que pudo atrapar el portero.

Las ocasiones se sucedieron. La más clara en una contra que condujo de forma espléndida Alberto Lozano, acompañado en la derecha por Pacheco. Alberto sorteó al último defensa con un pase al hueco para Pacheco, que controló el balón, pisó el acelerador y se plantó  frente al portero para batirle por un lado. Pero ahí comenzó la tortura del delantero rakiniano que se encontró un arquero inspirado sacando una mano salvadora que desvió el balón lo justo para evitar el tanto.

Aún hubo tiempo para otra muy clara, esta vez en los pies de Lozano que tras una gran jugada del ataque del Rakiss disparó demasiado cruzado cuando todos veíamos el balón dentro. Se resistía el gol de la tranquilidad y comenzaba la segunda parte. Álex sustituyó a los diez minutos a Pitu y se incrustó sólidamente en el centro del campo.

El Rakiss seguía a lo suyo, a las ocasiones a la contra. Pero el NKG dispuso también de varias ocasiones claras. En una de ellas, Antonio se jugó el tipo en una salida a la desesperada que acabó en un choque de trenes con el delantero contrario. En otra el balón se paseó por la frontal del área pequeña en un pase de la muerte que, por suerte, nadie supo remachar.

Jugaba con fuego el Rakiss y a punto estuvo de quemarse si no es por un Yoki super atento. Lozano que ya tenía una tarjeta amarilla fue advertido por segunda vez por el árbitro, que sin duda ya le había tomado la matrícula a la espera de la siguiente. El mister, no se lo pensó y prefirió hacer el cambio. Salió él, jugándose quizá demasiado pronto la rodilla, y al fin se quitó el ansia de fútbol que llevaba encima.

El Rakiss se puso el mono de trabajo y apretó filas. Abraham, J.J. y Jose se multiplicaban. Álex peleaba cada balón por arriba y los ganaba para darle algo de oxígeno al Rakiss. Jorge y Rober cerraban las bandas a cal y canto y Yoki se asociaba a la mínima con Pacheco, que nuevamente, solo ante el peligro, se las veía con la defensa.

En una de las últimas oportunidades de gol, Pacheco ganó un balón dividido y encaró al portero que salía a la desesperada, le sorteó con un sombrero, prolongó de cabeza para marcar y bajo la mismísima línea de gol vio como, una vez más la defensa rival frustraba la ocasión más clara de la segunda mitad.

EL SELLO


Tocó sufrir y sufrió el Rakiss pero aguantó hasta el final sin peligrar demasiado y jugando con cabeza y personalidad. La próxima vez jugaremos de nuevo con fuego, como tantas veces hemos hecho, pero con un poco de suerte será el rival el que salga abrasado.




2 comentarios:

Anónimo dijo...

grande litri, da gusto leerte!!!.
vamos chicos esto solo acaba de empezar.
que ganas tengo de recuperarme y estar en las cronicas con vosotros.

Aupa rakiss!!!

Fdo.: Mario 4

pitu dijo...

Eres un crack no dejes de escribir nunca!!! A mí me da un mono de que llegue el sábado nada más leer las crónicas... Vamooooooos!!!
Mario recuperateeeee