"CUANDO PERDONAS... LO ACABAS PAGANDO SIEMPRE"
Y es que en la tarde del domingo el Rakiss dejó escapar dos puntos que eran suyos. A veces la suerte no está de cara, pero esto nos debe servir para afinar nuestra puntería en el futuro. La tarde estaba perfecta para dar la cara, para seguir con las buenas sensaciones que el equipo estaba dejando las últimas semanas y para seguir dando golpes en la mesa demostrando que este año va a ser nuestro año, y que la grandeza de esta familia nunca se ha perdido.
Esa grandeza que nos hemos ido forjando dentro y fuera del campo desde hace tantos años y que ha ido enriqueciéndose con las incorporaciones al equipo de cada temporada. Solo está en nuestra mano seguir demostrándolo, solo nosotros sabemos lo que llevar este escudo en el pecho significa y solo nosotros sabemos por qué el Rakiss NUNCA PIERDE.
Comenzamos el partido enchufadísimos, con once luchadores sobre el campo que se dejaban la sangre y el orgullo cual espartano en la batalla de las Termópilas. El ejército formaba en el 4-4-2 habitual con dos lanzas en la punta de ataque, tan rápidas como mortales. El equipo rival estaba compuesto por chavales jóvenes, gente que parece ser venía del fútbol sala y que por ello demostraba buenas maneras en el trato del balón, tratando de hacer su juego a base de toque y velocidad.
Ay amigos... esas son las presas que más nos gustan. Y cuando el Rakiss quiere, no hay nadie que le pare, solo nosotros mismos. Durante los primeros compases ejercimos una presión brutal a su salida de balón, con las líneas muy juntas y mucha entrega y ayudas entre compañeros. Hacía tiempo que no veía al equipo de esta manera, con tantas ganas...
Fruto de ello las ocasiones comenzaron a llegar por oleadas. Una tras otra hasta que dio sus frutos en una internada de Rudy por la banda, que cedió el balón para que Raúl fuera arrollado por un defensa que no pudo hacer más que eso, llevarse por delante a nuestro Lobezno particular...
El mayor de los Rueda asumió la responsabilidad que para este equipo supone lanzar un penalti, ya que contamos con más errores que aciertos desde los 11 metros. Colocó el balón, tomó carrerilla y desafió al portero con la mirada abrasadora de Cíclope con la que declaró sus intenciones... Esta vez no iba a pasar lo mismo, y la pelota entró magistralmente junto al palo rasa engañando por completo al guardameta rival. 1-0 y continuamos la batalla.
No bajamos los brazos, continuamos pegando fuerte y las ocasiones se sumaban por parte de Jachu tras una internada veloz de Wilkins por la banda que atajó el portero, y otra de éste último que desperdició cuando el gol parecía cantado. No paramos, no nos rendimos y el gol no se hizo esperar. En un saque de esquina botado por Mario, el balón quedó muerto para que Wilkins hiciera justicia y subiera el 2-0 al marcador.
Y sin saber por qué ni cómo... el equipo entró en unos últimos minutos de la primera parte para olvidar, nos relajamos y el rival supo aprovecharse de ello en un balón que llegó tras un despiste defensivo hasta su delantero, que fusiló a un gran Jota que nos llevaba deleitando con algún paradón durante esta parte, pero que nada pudo hacer ante éste. Y con el 2-1 llegamos al descanso.
La segunda parte comenzó con algún cambio, Jachu se descolgó a la banda y Litri entró en el terreno de juego para hacer pareja en punta con la gacela humana: Wilkins. El dominio del juego se repartió más entre ambos equipos y seguimos perdonando. Hasta que ocurrió lo que parece que tiene que ocurrir siempre. En una jugada desafortunada la pareja de baile de Raúl, perdió un balón y acabó cometiendo falta recibiendo su segunda tarjeta amarilla y con ello la expulsión.
Nuestra Antorcha humana particular tuvo que abandonar al equipo y dejarlo con un luchador menos. Con el lanzamiento de esa falta en la frontal llegó el empate y aun quedaba mucho tiempo para seguir demostrando nuestra brega en el campo.
Seguimos peleando, dejándonos el alma en cada balón, sudando sangre con el sacrificio que supone ser uno menos... Y demostrando la casta que tiene este equipo. Pero el marcador no se movió de ahí al final, y aunque en un lance Rudy supo aprovechar su picaresca y expulsaron a un rival equilibrando el partido en número, no supimos rematar la jugada y la sensación que queda es esa: cuando perdonas, siempre lo acabas pagando.
LAS CLAVES:
Y es que en la tarde del domingo el Rakiss dejó escapar dos puntos que eran suyos. A veces la suerte no está de cara, pero esto nos debe servir para afinar nuestra puntería en el futuro. La tarde estaba perfecta para dar la cara, para seguir con las buenas sensaciones que el equipo estaba dejando las últimas semanas y para seguir dando golpes en la mesa demostrando que este año va a ser nuestro año, y que la grandeza de esta familia nunca se ha perdido.
Esa grandeza que nos hemos ido forjando dentro y fuera del campo desde hace tantos años y que ha ido enriqueciéndose con las incorporaciones al equipo de cada temporada. Solo está en nuestra mano seguir demostrándolo, solo nosotros sabemos lo que llevar este escudo en el pecho significa y solo nosotros sabemos por qué el Rakiss NUNCA PIERDE.
Comenzamos el partido enchufadísimos, con once luchadores sobre el campo que se dejaban la sangre y el orgullo cual espartano en la batalla de las Termópilas. El ejército formaba en el 4-4-2 habitual con dos lanzas en la punta de ataque, tan rápidas como mortales. El equipo rival estaba compuesto por chavales jóvenes, gente que parece ser venía del fútbol sala y que por ello demostraba buenas maneras en el trato del balón, tratando de hacer su juego a base de toque y velocidad.
Ay amigos... esas son las presas que más nos gustan. Y cuando el Rakiss quiere, no hay nadie que le pare, solo nosotros mismos. Durante los primeros compases ejercimos una presión brutal a su salida de balón, con las líneas muy juntas y mucha entrega y ayudas entre compañeros. Hacía tiempo que no veía al equipo de esta manera, con tantas ganas...
Fruto de ello las ocasiones comenzaron a llegar por oleadas. Una tras otra hasta que dio sus frutos en una internada de Rudy por la banda, que cedió el balón para que Raúl fuera arrollado por un defensa que no pudo hacer más que eso, llevarse por delante a nuestro Lobezno particular...
El mayor de los Rueda asumió la responsabilidad que para este equipo supone lanzar un penalti, ya que contamos con más errores que aciertos desde los 11 metros. Colocó el balón, tomó carrerilla y desafió al portero con la mirada abrasadora de Cíclope con la que declaró sus intenciones... Esta vez no iba a pasar lo mismo, y la pelota entró magistralmente junto al palo rasa engañando por completo al guardameta rival. 1-0 y continuamos la batalla.
No bajamos los brazos, continuamos pegando fuerte y las ocasiones se sumaban por parte de Jachu tras una internada veloz de Wilkins por la banda que atajó el portero, y otra de éste último que desperdició cuando el gol parecía cantado. No paramos, no nos rendimos y el gol no se hizo esperar. En un saque de esquina botado por Mario, el balón quedó muerto para que Wilkins hiciera justicia y subiera el 2-0 al marcador.
Y sin saber por qué ni cómo... el equipo entró en unos últimos minutos de la primera parte para olvidar, nos relajamos y el rival supo aprovecharse de ello en un balón que llegó tras un despiste defensivo hasta su delantero, que fusiló a un gran Jota que nos llevaba deleitando con algún paradón durante esta parte, pero que nada pudo hacer ante éste. Y con el 2-1 llegamos al descanso.
La segunda parte comenzó con algún cambio, Jachu se descolgó a la banda y Litri entró en el terreno de juego para hacer pareja en punta con la gacela humana: Wilkins. El dominio del juego se repartió más entre ambos equipos y seguimos perdonando. Hasta que ocurrió lo que parece que tiene que ocurrir siempre. En una jugada desafortunada la pareja de baile de Raúl, perdió un balón y acabó cometiendo falta recibiendo su segunda tarjeta amarilla y con ello la expulsión.
Nuestra Antorcha humana particular tuvo que abandonar al equipo y dejarlo con un luchador menos. Con el lanzamiento de esa falta en la frontal llegó el empate y aun quedaba mucho tiempo para seguir demostrando nuestra brega en el campo.
Seguimos peleando, dejándonos el alma en cada balón, sudando sangre con el sacrificio que supone ser uno menos... Y demostrando la casta que tiene este equipo. Pero el marcador no se movió de ahí al final, y aunque en un lance Rudy supo aprovechar su picaresca y expulsaron a un rival equilibrando el partido en número, no supimos rematar la jugada y la sensación que queda es esa: cuando perdonas, siempre lo acabas pagando.
LAS CLAVES:
- El buen momento de forma del equipo. Se demostró que este año no parece que vaya a ser como los anteriores, este año se respira otro ambiente y eso se nota en el campo. Y aunque este domingo nos dejamos 2 puntos en el campo, dependemos de nosotros y esta semana tenemos la oportunidad para resarcirnos.
- La vuelta de Jachu y el debut de Wilkins. Ambos aportaron mucha velocidad en el ataque del Rakiss y formaron una dupla excelente. Además cuando entró Pacheco en la segunda puso ese granito de arena que aporta cada semana con su poderío.
- Tanto perdón... Lamentablemente tuvimos que acordarnos de las ocasiones falladas tras agotar los 90 minutos del juego, y eso es algo que no puede volver a ocurrir. Así que ánimo que a veces la pelota se pone tonta y es cuestión de suerte.
Y nada más, como cada semana felicitaros por la lucha y ya sabéis...
ARRIBA RAKISS
Fdo: Pitu
2 comentarios:
Se lo regalamos!!!!!!Me cago en todo...2 jugadas aisladas y nos los cuelan y nosotros 200 y solo metemos 2!!Hay que ponerse las pilas en aciertos (lo cual me aplico, eh?)
Nos vemos el sábado
Grande Pitu, una lástima de partido cuando íbamos tan lanzados, está claro que algo de gafe tuvimos, por qué sería....
Litri
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